En la década de 1970, la URSS construyó el radar Duga, tan poderoso que interrumpió las estaciones de radio estadounidenses a miles de kilómetros de distancia. Apodado el "pájaro carpintero ruso" por su espeluznante sonido de clic en las frecuencias globales, se encuentra dentro de la Zona de Exclusión de Chernobyl.